Desde su primer curso de mecánica de suelos hace casi dos décadas hasta su trabajo actual en proyectos geotécnicos, a Héctor siempre le ha apasionado descubrir cosas; en su opinión, un estudio de ingeniería se parece mucho a un trabajo de detective. Ha participado en presas de relaves y otros diseños en más de una docena de países, desde Canadá hasta Argentina y desde Brasil hasta Indonesia. ¿Sus principales responsabilidades? Búsqueda de estrategias para llevar a cabo proyectos e identificar a los mejores miembros potenciales del equipo para lograr los objetivos de la mejor manera.
Héctor cree que la primera responsabilidad del consultor es escuchar. Para comprender lo que un cliente necesita de él y descubrir cómo podemos ayudarlo, su trabajo más desafiante ha sido una investigación forense sobre la falla de la presa Mount Polley. Héctor fue contratado como parte del equipo que investigó el mecanismo de falla y evaluó qué salió mal. Ver el evento a través de una evaluación forense mejoró su comprensión integral de la situación y esa perspectiva lo ha convertido en un ingeniero aún más eficaz.
Al reconocer que se puede aprender algo nuevo todos los días, Héctor valora la oportunidad de trabajar con personas que comparten sus experiencias y, cuando no está trabajando en servicios geotécnicos, es posible que lo encuentre dibujando, caminando o tocando la guitarra.